No estás sola

 Tal vez así te sientas, y probablemente, si como yo, te encontraste con la sorpresa de que tenías una mutación en el gen BRCA sin una historia familiar clara que apuntara a cancer, y eres la primera en tu familia que recibe esta noticia, sientas que estás más sola que nunca. Que estás trazando el camino, caminando hasta delante, caminando a oscuras. 

Hace dos meses y medio descubrí que tenía cancer de seno, quince días después de cumplir 43 años. 

Recuerdo que antes de entrar a la mamografía, la secretaria me felicitó por mi cumpleaños. Recuerdo también que, unos días después, antes de recibir los resultados, bromeaba con mi doctor, que seguramente era una de sus pacientes más sanas y jóvenes. Fue este doctor quien me convenció a hacerme la mamografía como parte de un chequeo general; a pesar que yo le dijese que me había hecho una hace dos años; dos meses antes de que comenzara la pandemia. El muy amablemente me recordó que en la Clínica Mayo el estándar era cada año, y sin más, agendó el estudio. El estudio que cambió mi vida.

Pero esta no es una historia sobre mi. Es una historia de eso que nos une a las dos: nuestro diagnóstico de BRCA y cómo aprender a vivir con esto. Yo no quiero caminar sola, si tengo que trazar mi nuevo camino, si tengo que interpretar mi nueva realidad y cambiar mi perspectiva, si tengo que tomar decisiones, tengo que creer, saber que no estoy sola. Simplemente soy pionera, como tú, para otras mujeres que en los próximos años, gracias a los avances de la ciencia, tendrán en sus manos, la información que hoy a ti y a mi nos angustia y nos asfixia.

Si como yo, tu también tienes BRCA, y si como yo, tu también tienes cancer, vivimos tiempos difíciles. Algo que no esperaba, dentro de todo lo difícil que es vivir un diagnóstico de cancer, es la cantidad de decisiones qué hay que tomar. Cada día me debo recordar a mi misma que si puedo. Que si puedo decidir lo que tengo que decidir.

No sé como vivir con BRCA, no sé cómo vivir con cancer, no sé como ser pionera. Pero estoy aquí, viviendo esto, y tengo que seguir caminando. Y hay algo que si sé: que no soy la única. No soy la primera mujer que le pasa lo que a mi, no soy la única que le ha pasado, y por lo tanto, no estoy sola. Mis decisiones, por más difíciles que sean, no son decisiones que se hayan tomado por primera vez. Tal vez hay un camino, tal vez no es perfecto, pero no estoy caminando totalmente a oscuras. 

De eso se trata esta página: BRCA.ME Ya que quiera o no, tengo que caminar este camino, tal vez puedo con mis pasos, iluminar por lo menos en algo el tuyo. Y que sepas, que tú tampoco estás sola.